El aislamiento con lana de roca ofrece excelentes prestaciones térmicas y acústicas, además de una óptima resistencia al fuego. Por ello, es una de las soluciones más utilizadas en la construcción.

¿Qué es la lana de roca?

La lana de roca es un material aislante obtenido a partir de la fusión de rocas basálticas, escoria de Asturias y briquetas recicladas de Navarra a una temperatura de 1600°C. Durante el proceso de enfriamiento, se generan fibras que posteriormente se transforman en distintos formatos según su uso. La fibra en formato a granel se emplea en aplicaciones de insuflado y soplado.

¿Cómo se aplica la lana de roca?

La lana de roca a granel está especialmente diseñada para su aplicación mediante insuflado en cámaras de aire, como fachadas y falsos techos. También puede aplicarse por soplado en grandes espesores en espacios bajo cubierta o buhardillas, garantizando así un aislamiento eficiente.